Una vez leí un estudio de una persona que se dedicaba al cuidado paliativo de ancianos. Esa mujer decía que las personas, cuando se morían, declaraban que hubieran deseado tener más valentía para haber vivido como ellas querían y no como el resto de personas esperaban de ellas.
Tú todavía estás a tiempo de vivir la vida que quieres tomando las decisiones más adecuadas. Seguro que en tu vida tendrás algo que no está funcionando del todo bien. Tal vez es el mejor momento para hacer algunos cambios.
Hazte la siguiente pregunta: «¿Qué es lo que está fallando en mi vida?»
Una gran parte de tu vida es el resultado de aquello en lo que te has enfocado. Si no te gusta algo, es el momento de elegir algo diferente. No tengas miedo de dejar de lado tus viejas costumbres y empezar de nuevo hoy. Es una nueva oportunidad para reconstruir lo que realmente quieres.
Aquí te dejo 5 trampas emocionales:
1) No salir de tu zona de confort.
Al salir de tu zona de confort, descubres de lo que realmente eres capaz. Los obstáculos simplemente te ponen a prueba. Recuerda que las personas más fuertes son las que sienten el dolor, lo aceptan y aprenden de él. En sus heridas encuentran la sabiduría y el crecimiento personal.
Vídeo: «Salir de la zona de confort»
2) Lamentarse por el pasado.
No te dejes controlar por el pasado. Tal vez podrías haberlo hecho de otra manera, o tal vez no. En cualquier caso ya no puedes cambiar el pasado así que concéntrate en mejorar tu presente. Perdona a aquellas personas que un día te hicieron daño y libérate de tanta negatividad.
3) Poner excusas.
La pereza puede parecer atractiva, pero la dedicación y el trabajo llevan a la plenitud y la felicidad a largo plazo. Si realmente quieres hacer algo, encontrarás una manera, y si realmente no quieres, encontrarás una excusa.
4) Centrarse en lo que no tienes.
Nunca tendrás suficiente tiempo, recursos o suficiente dinero. Tarde o temprano te darás cuenta que no es lo que te falta lo que cuenta, sino lo que haces con lo que tienes.
Las personas más felices y más exitosas no son las más afortunadas sino que simplemente aprovechan mucho mejor lo que tienen. La razón por la que muchas personas se dan por vencidas es porque se centran en lo que les falta.
5) El miedo al fracaso.
Si tienes demasiado miedo al fracaso nunca alcanzarás algo que realmente merezca la pena. Tu deseo de tener éxito debe dominar tu miedo al fracaso.
Acepta lo que tienes, deja de lado tus miedos y ten fe en lo que podrías llegar a alcanzar. Inevitablemente tendrás un montón de errores y sentirás mucho dolor, pero en la vida, los errores te hacen más inteligente y el dolor te hace más fuerte.
En pocas palabras: no te preocupes demasiado por tus errores porque algunas de las cosas más hermosas que creamos en la vida provienen de los cambios que hacemos después de los fracasos.
Hola Daniel,
Te felicito por los excelentes consejos que nos brindas, pero, cómo ponerlos en práctica? Ya se sabe que del dicho al hecho hay mucho trecho! Estaría bien un post con cuestiones relativas a poner en marcha las grandes ideas.
Muchas gracias de nuevo!
Hola Daniel!
Me ha gustado mucho tu post. En mi caso también hay algo que me falla, y está relacionado con el plano laboral. Actualmente ya no me realiza mi trabajo y siento una sensación de «cansancio» y hastío hacia el mismo, a pesar de que mis condiciones laborales no son nada malas… Yo no tengo miedo a cambiar, ni a fracasar, ni a esforzarme por conseguir algo nuevo, es más lo estoy deseando… Sólo hay un «pequeño» problema y es que no sé que es lo que quiero hacer…
Hola David, en primer lugar, gracias por escribirme.
Yo creo que es normal, en todos los trabajos, el hecho de que todas las personas pasen por momentos de desmotivación a la hora de realizar sus tareas laborables. Por muy atractivo que sea tu trabajo, llega un momento en el que dejas de sentir esa pasión e ilusión con la que trabajas. Te lo digo porque a mi me ha pasado lo mismo.
Yo trabajo en este blog y en otras tareas relacionadas con el marketing online desde hace 6 años. Al principio lo que sentía por este trabajo es pura pasión. Me levantaba y lo que primero hacía era coger el ordenador y ponerme a revisar a ver cuántas visitas tenía en el blog en ese mismo momento. Todavía lo sigo haciendo pero ya no con la misma motivación de antaño.
Por eso es importante que intentes descubrir nuevos retos o alicientes en tu trabajo. Es la búsqueda continua de tratar e encontrar algo que te motive. ¿Tienes compañeros de trabajo a tu lado? ¿Por qué no charlas con ellos e intentas pasártelo bien mientras trabajas?
Un cordial saludo.