El Dueño de la Luna: una historia que nos muestra que ninguna idea es imposible de realizar

El vídeo que vas a ver comienza con una frase muy motivadora:

«Ninguna idea es imposible de realizar, por muy loca que parezca.»

Nos cuenta la historia de Jenaro Gajardo Vera, un chileno que se hizo mundialmente famoso porque en 1954 declaró ser el propietario de la luna.

El 25 de septiembre de 1954, Gajardo solicitó ante notario dejar constancia de su declaración como dueño de la Luna «desde antes de 1857», fórmula legal utiliza entonces para obtener la propiedad de tierras sin título existente.

Lo hizo para unirse al Club Social de Talca, que tenía como requisito de afiliación tener una propiedad.

Su historia ha quedado reflejada en este breve corto animado que nos muestra cómo a pesar de las dificultades que se nos presentan en la vida, siempre hay una salida más o menos creativa.

Gajardo fue un claro ejemplo de creatividad y empeño para lograr su objetivo. A veces, aquello que imaginamos podemos llegar a conseguirlo si contamos con la valentía de llevar a cabo los pasos necesarios.

A Gajardo no le importó el revuelo mundial que se montó ante tan excéntrica declaración. Sin embargo, la fórmula legal era válida puesto que la luna se considera como un objeto perteneciente a la tierra.

Los Estados Unidos se enfrentaron a un surrealista dilema legal ya que por aquel entonces estaban planeando viajar a la luna.

Finalmente, el presidente Nixon le pidió permiso por escrito para que Aldrin, Collins y Armstrong pudieran alunizar.

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