
Escribir mensajes de texto mientras se conduce se ha convertido en una de las principales causas de accidentes de tráfico en todo el mundo. Más allá de un problema anecdótico, esta práctica revela un preocupante patrón de distracción que pone en riesgo la seguridad de conductores, pasajeros y peatones. Entender las consecuencias de este comportamiento y cómo evitarlo puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte.
La peligrosidad de las distracciones al volante
Las distracciones al volante son responsables de una alarmante proporción de los accidentes de tráfico. Según datos recientes, en España, uno de cada tres siniestros mortales se produce por distracción. Este porcentaje coloca a las distracciones como una de las principales causas de accidentes, junto con el exceso de velocidad y el consumo de alcohol y drogas. La letalidad de estos accidentes también ha ido en aumento, pasando de 1,6 fallecidos por cada 100 víctimas en 2012 a 2,4 en 2021.
Un estudio de la Dirección General de Tráfico (DGT) destaca que el uso del móvil al volante incrementa hasta 23 veces el riesgo de sufrir un accidente. Esto incluye acciones como enviar un mensaje, contestar una llamada o incluso revisar notificaciones. Mientras tanto, hablar por el móvil con manos libres también se considera perjudicial, ya que reduce la capacidad de atención hasta en un 40%.
Principales causas de distracciones al volante
Las distracciones se pueden clasificar en tres categorías principales: visuales, manuales y cognitivas. A continuación, exploramos algunos de los motivos más comunes:
- Móviles y dispositivos electrónicos: Escribir mensajes, responder a llamadas o revisar el GPS son prácticas frecuentes y extremadamente peligrosas.
- Fatiga y somnolencia: A menudo subestimada, la fatiga puede disminuir significativamente los reflejos y la capacidad de atención.
- Entornos externos: Mirar el paisaje, el «efecto mirón» en accidentes ajenos o buscar información como restaurantes o hoteles son distracciones habituales.
- Interacciones humanas: Hablar con los pasajeros o atender a niños en el coche puede desviar la atención del conductor.
- Otros factores: Cambiar la música, comer, fumar o incluso ajustar los espejos mientras se conduce son causas frecuentes de distracción.
Consecuencias de las distracciones al volante
Los peligros de las distracciones se reflejan tanto en las estadísticas como en las historias personales de quienes han sufrido accidentes. Aquí algunas de las principales consecuencias:
- Aumento de la distancia de frenado: Cuando un conductor aparta la vista de la carretera durante solo cinco segundos a 100 km/h, el coche recorre 120 metros sin control.
- Falta de reacción ante imprevistos: Un segundo de distracción puede ser suficiente para no identificar un obstáculo o peatón en la vía.
- Colisión con otros vehículos: Las colisiones traseras son especialmente comunes cuando el conductor no mantiene la atención requerida.
Casos específicos: el uso del móvil
El móvil merece especial atención debido a su alta incidencia en siniestros. En España, entre 2018 y 2022 se registraron casi 500.000 multas por uso indebido del móvil al volante. Esta práctica no solo es peligrosa sino que también es considerada una infracción grave, con multas de hasta 200 euros y la pérdida de hasta 6 puntos del carnet.
Cómo evitar las distracciones al volante
Reducir el número de distracciones es una tarea de responsabilidad individual y colectiva. A continuación, algunos consejos prácticos para mantener la atención en la carretera:
- Desactiva el móvil: Utiliza el modo avión o configúralo para no recibir notificaciones mientras conduces.
- Planifica tu ruta: Consulta el GPS antes de empezar el viaje y utiliza comandos de voz si es necesario realizar ajustes.
- Realiza pausas: Descansa cada dos horas en trayectos largos para evitar la fatiga y el sueño.
- Evita comer o beber: Estas acciones pueden parecer inofensivas, pero son una causa frecuente de distracción.
La educación y la concienciación son herramientas fundamentales para erradicar las distracciones. Implementar campañas informativas y fomentar cursos de conducción segura podría reducir significativamente la incidencia de este problema.
No subestimes el impacto de una distracción al volante. Tomar medidas hoy puede salvar vidas mañana.