Las emociones forman parte de la vida de cualquier ser humano, estando presentes en cada momento de la misma. Se trata de la respuesta que da el cuerpo ante una determinada situación como puede ser el caso del enfado o de la tristeza. Es importante saber controlar y gestionar las diferentes emociones para conseguir cierto equilibrio a nivel emociona.
En el siguiente artículo vamos a hablarte de los diferentes tipos de emociones que existen y cómo las mismas influyen en la vida diaria.
Qué función tienen las emociones
Se puede decir que las emociones tienen tres funciones principales o esenciales:
- Una primera función sería adaptativa, es decir preparan al organismo para que pueda actuar de una manera eficaz.
- Otra función sería social. Las emociones van a ayudar a expresar el estado de ánimo de las personas y a que puedan interactuar las unas con las otras. La expresión puede ser verbal mediante las palabras o no verbal mediante gestos o miradas.
- La tercera función sería motivacional y es que existe una relación estrecha entre la motivación y las emociones. Es normal por tanto que cualquier comportamiento motivado provoca una determinada emoción y lo mismo pasa al revés.
Tipos o clases de emociones
Un ser humano a lo largo de sus vida va a experimentar emociones de todo tipo y clase. Acto seguido vamos a detallarte los tipos de emociones que hay:
Emociones básicas
Este tipo de emociones son innatas a cualquier ser humano y serían la alegría, la tristeza, el miedo, la ira, la sorpresa y el enfado. Este tipo de emociones va a desempeñar un papel clave en el día a día de la persona y tienen las siguientes características:
- La alegría permite a la persona tener cierto bienestar y felicidad.
- La tristeza ayuda a procesar la pérdida y a adaptarse a situaciones complicadas.
- El miedo permite a la persona protegerse de ciertos peligros.
- La ira permite establecer una serie de límites y a proteger ciertos derechos.
- La sorpresa ayuda a la persona a estar en alerta ante lo que pudiera ocurrir.
- El enfado permite alejarse a la persona de ciertos estímulos considerados como dañinos.
Emociones sociales
Las emociones sociales suelen producirse a raíz de la interacción con otras personas. De esta manera serían: el amor, la gratitud, la envidia, la vergüenza y la culpa. Estas emociones son claves y esenciales para conseguir una buena relación con los demás:
- El amor es una emoción clave a la hora de establecer vínculos con otras personas incluyendo las relaciones íntimas o personales.
- La gratitud permite apreciar lo que se tiene o posee.
- La envidia se produce cuando existe un fuerte deseo de tener lo que otros poseen.
- La vergüenza permite aprender de los errores y ayuda a la persona a crecer.
- La culpa se produce cuando la persona realiza algo malo y el interés por corregir tales comportamientos.
Emociones autodirigidas
Las emociones autodirigidas como su mismo nombre indica, son las que se experimentan hacia la propia persona. Estas emociones son el orgullo, la vergüenza, la culpa y la satisfacción. Las características de este tipo de emociones son las siguientes:
- El orgullo es una emoción que se produce cuando se consigue o se logra algo reseñable.
- La vergüenza y la culpa se producen cuando la persona no es capaz de cumplir con sus valores preestablecidos.
- La satisfacción es la emoción producida tras lograrse cumplir una serie de objetivos.
Emociones mixtas
Aparte de las emociones individuales, la persona puede llegar a experimentar lo que se conoce como emociones mixtas. Este tipo de emociones se caracterizan por ser una mezcla de diferentes elementos emocionales como es el caso de sentir alegría y tristeza a partes iguales a la hora de recordar ciertos momentos del pasado.
Emociones primarias y secundarias
Aparte de la clasificación vista anteriormente, las emociones también pueden ser primarias y secundarias. Las primarias son emociones directas ante un determinado estímulo como es el caso del miedo ante una determinada situación de peligro. En el caso de las secundarias, éstas van a surgir a partir de las emociones primarias, relacionándose con ciertas creencias o reflexiones personales.
Cómo gestionar las diferentes emociones
Saber gestionar las diferentes emociones es clave y esencial a la hora de conseguir cierto bienestar de tipo emocional. No pierdas detalle de una serie de consejos o recomendaciones que te ayudarán a gestionar y a controlar de manera perfecta las diferentes emociones:
- Lo primero de todo es saber identificar las emociones. A partir de aquí es mucho más fácil y sencillo el poder controlarlas y gestionarlas.
- El segundo paso consiste en aceptar las emociones. Es indiferente que sean buenas o malas ya que todas son igual de válidas y brindan una información bastante útil a nivel general.
- Es importante el desarrollar ciertas habilidades que permitan regular las emociones. De esta manera resulta mucho más fácil y sencillo el poder manejarlas de una manera correcta.
- Resulta esencial cultivar y desarrollar la inteligencia emocional. Esto ayuda a mejorar de manera notable las distintas relaciones y permite manejar sin problema alguno ciertas situaciones emocionales.
La importancia de la educación emocional
Una parte importante de la sociedad no es verdaderamente consciente, de la importancia que tiene la educación emocional en el día a día de las personas. La inteligencia emocional ayuda a tener una buena salud mental y evita ciertos problemas relacionados con la misma. No solo es positiva para la vida diaria sino que también es buena en otros ámbitos tales como el trabajo o la educación.
En definitiva, no cabe duda de que las emociones forman parte importante del día a día de cualquier ser humano. A lo largo de la vida se producen emociones de todo tipo y clases. Resulta importante el saber identificar de manera clara las distintas emociones y saber gestionarlas a la perfección. Ello ayuda a que la persona disfrute de una vida totalmente equilibrada y sea feliz. Es bueno aprovechar al máximo el poder de las emociones para poder crecer a nivel personal y llegar al tan ansiado bienestar.