Cuando dos personas se juran amor eterno en ningún momento piensan que no durará para siempre o que acabarán llevándose mal. Nadie sabe cómo irán las circunstancias de la vida, y siempre que queda amor, hay esperanza… Pero cuando el amor se acaba, entonces es necesario pasar página y aprender sobre cómo superar un divorcio.
Hay personas que cuando se divorcian lo están esperando porque les resulta como una liberación. En cambio, hay otras personas que se divorcian y lo sienten como una imposición porque en realidad, no quieren hacer esto.
No hace falta que lo pongas bonito, cuando hay un divorcio duele mucho emocionalmente. Una etapa se cierra y no siempre es plato de buen gusto. Además, pasar por todo el proceso judicial es bastante agotador, y en ocasiones traumático… sobre todo cuando se convierte en una batalla campal.
Acepta que el divorcio es inminente
Quizá no quieres que nada de esto ocurra, pero está pasando. Aunque esos pensamientos pueden ser ciertos, el primer paso hacia la curación después del divorcio es aceptarlo por completo. Tienes que pensar firmemente en tu cabeza: «Me estoy divorciando» o «Estoy divorciado». Esa es tu nueva realidad.
La mayoría de las mujeres u hombres tratan de negar desesperadamente la verdad todo el tiempo que pueden. Aunque conocen la realidad de la situación en su cabeza, lo niegan en sus acciones al mantener lazos con su ex de manera poco saludable.
A menudo, las ex parejas intentan mantener su pie en la puerta de nuestra vida tratando de ser nuestro amigo, u ofreciéndose arreglar el fregadero… enviándote flores y dulces diciendo que todavía te quiere.
Estar divorciado significa que ambos deben aceptar la consecuencia natural del divorcio: sacar de tu vida a tu ex lo antes posible, o si tenéis hijos, llevaros bien en beneficio de los pequeños dejando de ser pareja para pasar exclusivamente a ser padres. Pero tienes que sacarlo de tu vida emocionalmente. Por lo general, cuanto menos interacción, mejor. No se deje arrastrar por dejar que ocupe un valioso espacio y energía en tu cabeza y tu vida.
Llora y permítete sentir las emociones
Permítete llorar, no niegues tus emociones. Es importante que entiendas que superar un proceso difícil conlleva que tus emociones se conviertan, al menos temporalmente, en una montaña rusa. Eso no tiene nada de malo, pero es necesario que seas consciente de esto para que, puedas controlar aquellas emociones que más puedan afligirte en estos momentos.
Tienes que pasar el proceso de duelo, porque el divorcio significa la muerte de tu matrimonio. Esto hará que lo experimentes como si estuvieras llorando la muerte de un ser querido. Las emociones que incluyen la negación, la tristeza y la ira debes aceptarlas porque son totalmente normales. Deja que las lágrimas recorran tus mejillas.
Toma el control de tu vida
Quizá te estés preguntando: “¿Cuánto tiempo lleva superar un divorcio?” A diferentes personas les lleva diferentes cantidades de tiempo superar su divorcio. Hay personas que lo superan en meses y otros que tardan años en hacerlo. Otra pregunta que puedes estar haciéndote ahora mismo es: “¿Alguna vez superaré mi divorcio?”
Sí, antes o después lo harás. Lo normal es que tardes un año más o menos, porque parte del proceso de duelo incluye llorar todos los aniversarios que suceden durante un año. Días festivos, cumpleaños, primavera, verano, otoño, invierno y otros aniversarios personales, de pareja o familiares.
Como te hemos comentado más arriba, permitirse tiempo para realmente llorar es necesario para avanzar. Puedes tomar el control aceptando que debes llorar esta pérdida. El verdadero paso para la recuperación del divorcio es cuando comprendes que el resto de tu vida depende de ti y puedes superar su divorcio.
Tu ex no controla tu vida, eres tú quien debe llevar las riendas. Tu ex ni nadie está a cargo de tu felicidad; eres tú quien tiene esa responsabilidad tan importante. Lo que suceda en el resto de tu vida es tu elección. Tienes la opción de decidir pasar los días amargado y enfadado, o puedes decidir buscar cosas para celebrar y estar agradecido.
Cuando estás en este viaje, decides si vas a salir de la cama todas las mañanas y encuentras algo productivo que hacer, o si te vas a quedar en la cama en un basurero emocional y físico todo el día. Así que piensa que superar el divorcio significa tomar el control personal y asumir la responsabilidad de tu vida. Tu futuro depende de ti.
Consíguelo
Puede sonar cansado todo esto, pero depende de tus acciones que consigas superar el divorcio. Tienes que empezar con pequeñas acciones puesto que se trata de un proceso. Primero, tendrás que centrarte en hacer pequeñas acciones que te iniciarán en el camino hacia una mejor vida después del divorcio.
Cuando te levantas por primera vez todas las mañanas, trata de decirte a ti mismo: «Gracias por haber sobrevivido toda la noche». Añade cinco cosas nuevas a tu lista todas las mañanas: “Gracias por mis ojos. Gracias porque puedo entrar a la cocina y comer algo bueno. Gracias por el café. Gracias porque tengo dos piernas y la libertad de usarlas «. Este ajuste de actitud aparentemente simple hacia la gratitud será profundo para lograr la curación en tu corazón.
Durante todo el día, concéntrate en dar estos pequeños (pero realmente importantes) pasos hacia adelante. Antes de hacer algo, tienes que preguntarte: «¿esto me hará avanzar o me mantendrá atrapado en el pozo del divorcio?”
Siempre toma la decisión de tomar esas pequeñas acciones para seguir avanzando. Tomar medidas también significa obtener los recursos que necesitas, como visitar este sitio. Ese es un paso muy positivo en la dirección correcta. Obtendrás ayuda, estímulo y herramientas para seguir creciendo por encima del divorcio en confianza y amor.
Recuerda que es importante que seas consciente de que si habéis llegado a este punto es porque era necesario. Es necesario que aceptes lo que está pasando y sobre todo, que sientas que puedes superarlo. Si esa persona ya no te quiere en tu vida, es porque no te merece. Mereces tener una vida mucho mejor y estar al lado de personas que realmente te acepten como eres, ahora y siempre.