Qué es la paciencia y cómo practicarla en tu vida

la paciencia en forma de caracol

Vivimos en una sociedad frenética donde todo tiene que ser inmediato. No sabemos esperar y cuando tenemos que hacerlo incluso, da ansiedad. Parece que la paciencia brilla por su ausencia en esta sociedad que va sin frenos, sin control y mirando continuamente el reloj.

La paciencia suele ser silenciosa y muy sutil, no se suele ver en público. Por ejemplo, cuando un padre le cuenta el tercer cuento a su hijo porque no quiere dormir, cuando un atleta se lesiona y tiene que esperar 3 meses para recuperarse… En cambio, la impaciencia sí se hace pública y llama la atención de todos; un conductor que toca el claxon impaciente por pasar ante un semáforo que se acaba de poner en verde, los clientes en la cola del supermercado que resoplan ante un problema que ocurre en la caja registradora, etc.

La importancia de la paciencia

Tener paciencia significa poder esperar con calma ante la frustración o la adversidad, por lo que en cualquier lugar hay frustración o adversidad, es decir, en casi todas partes, tenemos la oportunidad de practicarla… ¡solo hay que querer hacerlo!

la paciencia en forma de reloj de arena

En casa con nuestros hijos, en el trabajo con nuestros colegas, en la tienda con la mitad de la población de nuestra ciudad haciendo cola… la paciencia puede marcar la diferencia entre la molestia y la ecuanimidad, entre la preocupación y la tranquilidad. Las religiones y los filósofos han alabado durante mucho tiempo la virtud de la paciencia, ¡y con razón! Ahora los expertos e investigadores también lo hacen. Efectivamente, las cosas buenas realmente llegan a aquellos que saben esperar. Por este motivo es necesario aprender a esperar en la vida.

La paciencia está vinculada a alcanzar los objetivos y a tener buena salud

El camino hacia el logro es largo, y los que no tienen paciencia, que quieren ver los resultados de inmediato, pueden no estar dispuestos a recorrerlo. Por ejemplo, personas que quieren todo ya, que quieren el mejor trabajo, el mejor sueldo, lo mejor de todo… Sin esfuerzo y sin trabajo duro. Al final se quedan sin nada porque aunque lo tenga, no saben darle el valor que se merece.

Las personas pacientes valoran el esfuerzo y cuando lo hacen, saben valorar más las cosas, algo que les permite ser más agradecidos y disfrutar más de la vida que aquellos que son impacientes. Las personas con paciencia interpersonal son capaces de progresar hacia sus metas y de sentirse más satisfechos cuando lo logran.

Por si fuese poco, la paciencia te ayuda a vivir en tranquilidad por lo que tu salud también se verá mejorada en todos los aspectos. Las personas pacientes tenían menos probabilidades de tener problemas de salud como dolores de cabeza, acné, úlceras, diarrea y neumonía.

Por otro lado, las personas que son más impacientes o que tienen irritabilidad, tendrán más problemas de salud y de sueño. Si la paciencia puede reducir nuestro estrés diario, es razonable especular que también podría protegernos contra los efectos dañinos para la salud del estrés.

la paciencia en meditacion

Cómo ser más paciente

Tener más paciencia en la vida solo te aportará beneficios por lo que es lógico que quieras trabajarla en tu interior. La paciencia te ayudará a vivir en mayor tranquilidad y sobre todo, a que puedas afrontar de mejor manera los obstáculos que puedas tener en la vida. A continuación vamos a comentarte algunas claves para que potencies la paciencia en tu vida.

Replantea la situación

Sentirse impaciente no es solo una respuesta emocional automática. También involucra pensamientos y creencias conscientes. Si un compañero de trabajo llega tarde a una reunión, puedes hablar de su falta de respeto o ver esos 15 minutos adicionales como una oportunidad para leer un poco. La paciencia está vinculada al autocontrol, tratar de regular conscientemente nuestras emociones puede ayudarnos a entrenar el autocontrol.

Practica la atención plena

Las personas que realizan atención plena por lo menos durante seis meses, se vuelven menos impulsivos y más dispuestos a esperar cosas buenas en la vida. Por este motivo la atención plena o meditación es una práctica que se puede realizar cada día. A veces, únicamente con respirar profundamente y notar los sentimientos de ira o agobio, es más que suficiente para aprender a responder con más paciencia en diferentes situaciones.

Sé agradecido

Las personas que se sienten agradecidas son mejores en retrasar pacientemente la gratificación. Cuando una persona está agradecido por lo que tiene hoy, no siente la desesperación por tener más cosas o por mejorar sus circunstancias de inmediato y menos, si con paciencia puede conseguir que con el tiempo su situación mejore notablemente más.

Deja de hacer cosas que no son importantes

Todos tenemos cosas en nuestras vidas que nos quitan tiempo de lo que es importante. Una forma de eliminar el estrés y aumentar la paciencia en nuestras vidas es dejar de hacer esas cosas. Tómate unos minutos y evalúa tu semana. Mira tu horario desde que te despiertas hasta la hora de irte a dormir. Saca dos o tres cosas que haces que no son importantes pero que te toman tiempo. Es hora de aprender a decir no a las cosas que te causan estrés y te impacientan.

Baja la velocidad en la vida

Estamos obsesionados con llegar antes, tener las cosas primero, hacer las cosas rápido… la velocidad nos genera adrenalina y por tanto parece que la lentitud es lo peor que existe. Esto hace que olvidemos lo más importante: lo que realmente vale la pena necesita tiempo. En ocasiones, la diferencia entre las buenas o las malas decisiones es el tiempo que se emplea en tomarlas.

practicar la paciencia

Tú construyes tu mundo y tu vida y si lo quieres todo rápido, es posible que no hagas una estructura sólida. Baja el ritmo de tu vida y las cosas te saldrán mucho mejor de lo que te imaginabas al principio.

Puedes tratar de protegerte de la frustración y la adversidad, pero vienen con el territorio del ser humano. Practicar la paciencia en situaciones cotidianas, no solo hará que la vida sea más placentera en el presente, sino que también puede ayudar a allanar el camino hacia un futuro más satisfactorio y exitoso.


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