El pensamiento lateral es una forma creativa de resolver problemas que todos tenemos si lo desarrollamos. Si alguna vez has escuchado, por otra parte, el pensamiento vertical, se refiere a la forma lógica y más tradicional de resolver los problemas.
Pero hoy nos vamos a centrar en el pensamiento lateral puesto que es el que más beneficios te puede aportar tanto en tu vida personal como profesional.
La mente lógica y el pensamiento lateral
En cualquier lógica existen reglas que se deben seguir para poder llegar a las metas, como por ejemplo, si quieres ganar al ajedrez tienes que seguir las reglas del juego. O si quieres cocinar una receta, tendrás que seguir los pasos de la misma para poder conseguir un buen resultado y disfrutar del plato. Pero, ¿cuáles son esas “piezas” que faltan exactamente? Esas reglas o “piezas” se asumen que están allí, que existen y que se deben saber para obtener buenos resultados en todo.
Se asume que exciten diferentes percepciones, conceptos y límites que se deben seguir en la vida para que todo tenga sentido y haya cierta armonía. El pensamiento lateral se refiere no a jugar con las piezas existentes, sino a buscar el cambio de esas mismas piezas. El pensamiento lateral se ocupa de la percepción de parte del pensamiento. Aquí es donde organizamos el mundo externo en las piezas que luego podemos “procesar”.
Edward de Bono
Un cerebro humano sano no siempre quiere ser creativo, está diseñado para descubrir cómo hacer las cosas o cómo pensar en ellas y luego «bloquea» esa respuesta automática o comportamiento en un proceso subconsciente para que el cerebro consciente pueda concentrarse en otras cosas si lo necesita, ahorrando tiempo y energía. Si no has oído hablar de Edward de Bono o del pensamiento lateral (Lateral Thinking en inglés) quizás has estado demasiado ocupado pensando de manera convencional.
Edward de Bono es un prolífico escritor, psicólogo maltés, graduado en la Universidad de Oxford. Es el padre del pensamiento lateral. Desarrolló técnicas de pensamiento lateral para que las personas fuesen capaces de superar la proclividad natural que hace que el cerebro se bloquee en patrones o hábitos y permitirnos así ser más creativos en el pensamiento. Es una forma de desarrollar ideas creativas e innovadoras, ¡por cualquiera que quiera hacerlo!
Las técnicas del pensamiento lateral
El pensamiento lateral es un conjunto de procesos que proporciona una forma deliberada y sistemática de pensar creativamente que resulta en un pensamiento innovador de manera repetible. Mientras que el pensamiento crítico se ocupa principalmente de juzgar el verdadero valor de las afirmaciones y buscar errores. El pensamiento lateral está más preocupado por el «valor de movimiento» de las declaraciones e ideas. Una persona usa el pensamiento lateral para pasar de una idea conocida a crear nuevas ideas. Se definen cuatro categorías principales de herramientas de pensamiento lateral:
- Herramientas generadoras de ideas: se liberan los patrones del pensamiento actual en sus vías actuales.
- Herramientas de enfoque que abren la mente a nuevas posibilidades en la búsqueda de nuevas ideas.
- Las herramientas de cosecha que ayudan a maximizar el valor se reciben de la idea que genera resultados.
- Las herramientas de tratamiento que fundamentan el proceso de creatividad hacen que las ideas descabelladas se ajusten a las limitaciones, recursos y apoyo del mundo real.
A menudo, tratar de pensar más en la misma dirección puede no ser tan útil como cambiar de dirección en el pensamiento. El esfuerzo en la misma dirección no necesariamente te ayudará a lograr el objetivo, a veces hay que cambiar la perspectiva y el pensamiento completo para poder avanzar. El pensamiento lateral se aleja deliberadamente del pensamiento «vertical» o lógico (el método clásico para resolver problemas: resolviendo la solución paso a paso a partir de los datos dados) o la imaginación «horizontal» (tiene muchas ideas pero no se preocupa por la implementación detallada de ellos por diferir el juicio).
Cuándo se puede usar
El pensamiento lateral es ideal para la resolución de problemas. A menudo, cuando estás resolviendo problemas o diseñando algo, puede haber una respuesta obvia. Si el asunto es importante, puede ser beneficioso para una pequeña cantidad de tiempo usar el pensamiento lateral para descubrir formas alternativas de definir el problema y comenzar a pensar en él en un sentido más amplio. Puedes entrenar a el cerebro para que sea más creativo y descubras mejores soluciones a los problemas conocidos.
Para encontrar nuevos enfoques
Es posible que la forma en que haces todo en tu vida o negocio sea la mejor manera posible de hacerlo, pero no es probable. Ya sea que hayas creado una forma de hacer las cosas por ti mismo o se te haya dicho que «esta es la manera de hacerlo correcta», es probable que haya otras formas de hacer esas cosas de manera más efectiva y eficiente. Al utilizar las técnicas del pensamiento lateral para buscar nuevas formas de superarte a ti mismo y al negocio, puedes lograr tus objetivos.
Para la innovación
Cada inventor o creativo deberá centrar su creatividad hacia el proceso de invención, ya sea un invento patentable o una aplicación móvil, algunas veces estará pensando en un estado de «página en blanco», no solo de mejorar lo que ya está inventado. El pensamiento lateral ayuda a los pensadores a ser más proactivos y confiados en su pensamiento. Al resolver un problema que aún no se conoce, el pensamiento lateral puede ayudarle a elegir el punto de partida.
¿Controlas tu pensamiento lateral?
Utilizar el pensamiento lateral no tiene que tardar más de dos minutos. Intentas ver las cosas de una manera diferente. Intentas encontrar un nuevo enfoque o un nuevo concepto. Y si no tienes éxito, simplemente déjalo en ese momento y continúa con la forma habitual de hacer las cosas. No importa qué tan corto sea el tiempo asignado al pensamiento lateral. Lo importante es que se asignes algún tiempo.
Dedicar treinta segundos de vez en cuando es mucho más útil que tener una sesión creativa de mucho tiempo. Como muchas cosas en la vida, si quieres mejorarla necesitas trabajar en ello. ¡La práctica hace al maestro!