En nuestro día a día establecemos conexiones con otras personas, y esto es un hecho determinante e importante. La comunicación más que el simple hecho de intercambiar palabras es una necesidad, ya que como piezas que somos de ese enorme rompecabezas llamado Universo, requerimos de la asociación con personas con las que podamos establecer vínculos que nos permitan tejer una red de desarrollo. Proceso comunicativo
Algunas personas podrían opinar que el afirmar que la comunicación es una necesidad es un hecho exagerado, sin embargo, si ponemos nuestra mente sobre el relato de la construcción de la torre de Babel, en el que Dios castiga la ambición de los seres humanos privándolos del código común (lenguaje) mediante el cual hilvanaban ideas. Esto se tradujo en un desastre, cuya consecuencia más notable fue que nunca se terminó la edificación del monumento. La comunicación es una herramienta poderosa que nos permite hacer cosas grandiosas, ya que nos permite establecer alianzas con nuestros semejantes (sinergia) para potenciar el esfuerzo en la construcción de realidades.
¿Qué es el proceso comunicativo?
La forma en que ejecutamos la comunicación se conoce como proceso comunicativo, y en este se involucran una serie de elementos que se disponen de tal manera que la transmisión del mensaje se hace efectiva.
Aunque existen otros aspectos a considerar, es importante resaltar que el eje central de un proceso de comunicación es el mensaje, el cual contiene la información, y es el elemento a través del cual podemos compartir (y a su vez nos pueden transmitir) ideas, pensamientos y emociones.
Elementos que conforman el proceso comunicativo
Dada la importancia de la comunicación en el desempeño del ser humano en su día a día, muchos han sido los que se han dedicado a evaluar el desarrollo del proceso, los elementos que ejercen influencia y la manera en la que están interconectados. Todo esto se realiza con el propósito de que al estudiar a fondo la manera en que se ejecuta, se puedan desarrollar herramientas que ayuden a su optimización, impulsando la comunicación en diversos niveles. A continuación, se muestran los elementos que lo conforman:
- Participantes: Acá se engloban a las personas que forman parte de la transmisión y recepción del mensaje. Son los encargados de generar una idea, expresarla y codificarla. Dependiendo del rol que adopten respecto al mensaje, pueden clasificarse en:
- Emisor: Es quien genera el mensaje. La idea surge de alguna región de su cerebro, y se instaura la necesidad de realizar su difusión, por lo que el individuo en este rol codifica esos procesos mentales a través de palabras y señales para que su interlocutor sea partícipe de la idea.
- Receptor: Es la persona, o grupos de personas, a quien se dirige el mensaje. En su rol, pone en funcionamiento mecanismos cerebrales para decodificar el mensaje que acaba de recibir, creando una impresión al respecto. En los casos de comunicación bilateral, el receptor debe generar una respuesta acorde al mensaje que recibe (asumiendo en ese caso, el papel del emisor).
- El mensaje: La idea que se quiere transmitir, y que surge de procesos mentales diversos factores como:
- Código empleado: se refiere al lenguaje, jerga, o dialecto.
- Tono de voz: Esto confiere un meta-mensaje que ayuda a reafirmar lo que se desea transmitir.
- Canal: Consiste en el medio elegido para difundir el mensaje, y que está muy ligado al tipo de comunicación que se desea entablar. En canal es importante, porque si codificamos el mensaje en un medio no es adecuado, la comunicación se verá rota y el mensaje no llegará a los individuos. En la comunicación hablada el canal usualmente es el aire; mientras que en la escrita es el papel sobre el cual liberamos el código.
- Contexto: Engloba el medio circundante al mensaje. Podríamos incluir aquí los aspectos físicos que caracterizan el lugar donde establecemos la conexión comunicacional, pero a su vez, se refiere a los elementos históricos y culturales que determinan el momento y el lugar en el que se efectúa el proceso.
- Retroalimentación: Está asociado al proceso en el que el receptor asume el papel de emisor al codificar un mensaje en reacción al estímulo que ha recibido de su interlocutor.
Factores que alteran el proceso de la comunicación
Muchas veces el proceso de la comunicación no resulta efectivo, porque o bien el mensaje no pudo ser transmitido; o el mismo fue codificado en forma incorrecta, por esta razón debemos considerar los siguientes elementos, y el impacto causado:
- Uso de un código no afín: Cuando la codificación de la información se hace en términos que no son comunes a todas las partes involucradas, se rompe la línea del proceso, porque, aunque el receptor presenció el mensaje, no pudo recibirlo, porque no manejaba la información requerida para decodificarlo.
- Canal con interferencias: Los ruidos y otras perturbaciones que impiden la fluidez del proceso, son agentes que limitan el proceso.
- Análisis del contexto: Si las personas involucradas en el proceso pertenecen a diferentes entornos sociales/culturales, la comprensión del mensaje podría verse alterada. Ya que la interpretación de los estímulos puede variar de un entorno a otro.
¿Cómo potenciar la transmisión de tu mensaje?
En muchos ámbitos resulta esencial que la comunicación se lleve a cabo en términos correctos, esto con el propósito de evitar malos entendidos. Muchos individuos que se han dedicado a la observación del desarrollo del proceso, y de sus observaciones se han derivado las siguientes:
- Acompañar el mensaje con señas que reafirmen aquello que deseamos transmitir.
- Observar como es recibido el mensaje, y evaluar si la reacción de los receptores es acorde con el contenido del mismo. En caso de no serlo, invitar al otro a expresar su opinión sobre la información que está recibiendo.
- Usar un tono de voz adecuado, y hacer uso del énfasis en las partes que consideremos es importante resaltar.
- Tratar de ubicarnos en una perspectiva que nos permita considerar las condiciones que puedan limitar el punto d vista del otro.
- Evaluar el tipo de mensaje que se desea transmitir, a fin de determinar el contexto y canal que mejor se adecúan al mismo.