Quizá en algún momento de tu vida hayas utilizado la palabra ‘utopía’. Es un término que suele utilizarse habitualmente para referirse a lo que sería lo perfecto, una realidad que podría ser perfecta, pero, ¿realmente utilizamos bien este término ¿Qué es exactamente? Utopía es por tanto, un término que te utiliza para referirse a un lugar imaginado donde todo es perfecto.
Se utiliza para describir un mundo imaginario donde existe la justicia social, como los principios para garantizarla. La utopía simboliza las esperanzas y los sueños de la gente. La utopía se convierte en sinónimo de imposible porque una vida ideal en una sociedad perfecta que ofrece parece estar fuera de alcance de las personas.
De dónde viene
Los autores de las utopías representan sociedades similares a las suyas, pero mejor organizadas. También ofrecen un plan detallado de cómo podemos crear una sociedad de este tipo y cómo podría gestionarse. El término fue tomado de la novela Utopía de Thomas More, publicada en 1551, en la que describía una sociedad ideal basada en la igualdad, la prosperidad económica y política y donde se erradicaban la pobreza y la miseria. La utopía de Thomas More está inspirada en la República de Platón, considerada la primera novela utópica.
Las obras utópicas más importantes incluyen “Mirando hacia atrás” de Edward Bellamy (1888); La utopía moderna de HG Wells (1905) y La forma de las cosas por venir (1933); El desposeído de Ursula K. Le Guin (1974), entre otros.
Optimismo y pesimismo en utopía
Hay visiones optimistas y pesimistas, las narrativas que reflejan la visión del mundo optimista podrían denominarse utopías y las narrativas que reflejan la visión del mundo pesimista podrían denominarse distopías.
Las distopías desafían la asunción del perfeccionismo humano por parte de la utopía y niegan la posibilidad de sociedades perfectas. La distopía utiliza la descripción de un futuro negativo y describe lo que sucederá si ciertas tendencias actuales continúan… es decir, es una visión negativa del mundo teniendo en cuenta cómo está evolucionando. Al igual que las utopías, las distopías sugieren y representan la posibilidad de cambiar la sociedad, pero, a diferencia de las utopías, no les ofrecen ninguna solución esperanzadora y no aceptan un futuro radicalmente nuevo… Piensan que las cosas pueden cambiar pero en base a la realidad con un enfoque poco positivo de lo que podría suceder en el futuro.
La historia utópica se suele ubicar en un lugar aislado, y la gente vive allí de acuerdo con los principios de ese lugar. Un lugar lejano donde todo podría ser lo perfecto que ahora no lo es. Existe una clase dominante dictada y promulgada, que a menudo se considera como idealista en la práctica hacia la sociedad y establece una sociedad que casi ha alcanzado la perfección, en un mundo idealizado y que no existe realmente. A diferencia de la política utópica, los gobiernos distópicos son opresivos, y los ciudadanos de la sociedad distópica no tienen una opinión positiva sobre ellos.
Mirando al futuro
Tanto las utopías como las distopías se establecen en el futuro y presentan los mismos elementos, pero en diferentes connotaciones, por ejemplo, tecnología y ciencia más avanzadas. Se mira al futuro pero con diferentes perspectivas, teniendo en cuenta la sociedad actual y lo que se opina de ella.
En las historias utópicas, se cree que se utiliza tecnología y ciencia más avanzadas para mejorar las condiciones de vida humanas, como la ausencia de muerte y sufrimiento. En las historias distópicas, la tecnología más avanzada está disponible solo para el grupo en poder para mejorar su opresión. A diferencia de la ficción utópica, que a menudo presenta a un extraño como protagonista, las distopías rara vez hacen eso. La creación de mundos imaginarios de distopía y utopía se basa probablemente en la percepción optimista o pesimista del autor del mundo.
La utilidad de la utopía en la sociedad
Como puedes comprobar utopía es un concepto amplio que se utiliza habitualmente pero que también se ha usado durante mucho tiempo por filósofos, pensadores, políticos y muchos autores. Pero, ¿por qué se utiliza el pensamiento abstracto para crear una realidad donde podría ser perfecta? Una perfección que quizá no exista nunca, pero que en realidad, está en la mente de las personas para intentar conseguir mejorar la sociedad actual y las vivencias presentes y futuras.
La utopía puede tener mucha más utilidad de lo que se pueda imaginar, tiene funciones que cuando se usa este término no se tienen en cuenta pero que tiene más fuerza de lo que podamos imaginar. Las personas quieren crear una función idílica, sin imperfecciones, y aunque es imposible de crear realmente tiene algunas funciones que merece la pena destacar:
Función crítica
La utopía sirve para hacer una crítica a la sociedad actual, a ver qué es lo que falla y qué es lo que podría mejorar. Es una forma de ver lo que sirve del sistema social presente y poder valorar la necesidad de un cambio en cualquier aspecto actual, aunque normalmente se suele tener en cuenta en un cambio político.
Función valorativa
La utopía también se utiliza para saber la influencia que puede tener en diferentes sociedades. Las utopías pueden servir para reflexionar acerca de los métodos de organización social y para conocer mejor el sistema político social.
Función de crear esperanza
La utopía también llena de esperanza el corazón de las personas. Es una forma en que el ser humano ve al futuro con esperanza, con ganas de mejorar las cosas, intentando conseguir que todo funcione correctamente, ver los fallos para mejorar en el futuro. De esta manera lo que se intenta es hacer ver a las personas que un futuro mejor es posible, siempre y cuando se quiera de verdad y se desee conseguir mejorar.
Función de orientación
Esta función es muy importante porque es la que establece objetivos y metas para ahora y en el futuro. Establecer un objetivo a largo plazo permite que las personas y la sociedad no se quede atascada en una falsa realidad. Se piensa cómo se quiere vivir en el futuro y se lucha para conseguirlo.