El cariño es el escalón más bajo del amor pero igual de importante para la vida de las personas. El cariño es un sentimiento moderado de amor o afecto que se siente hacia una persona o animal. Cuando se siente se desea el bien para otra persona y se disfruta de su compañía. Es tan bonito su significado y el sentimiento que genera que también se utiliza como palabra de cercanía entre dos personas que se quieren.
El cariño tiene importancia en la vida de las personas porque nos hace sentir bien, nos hace sentir aceptado por los demás y también, despierta sentimientos positivos por aquellos que tenemos cerca y les apreciamos. El cariño, al igual que el amor, es la mejor medicina para cualquier mal, sobre todo emocional, que se pueda tener.
El poder de la actitud
La actitud de las personas puede marcar tu estado de ánimo. Por ejemplo, si vas a una consulta de un médico y su actitud es negativa hacia ti, saldrás con mala sensación… En cambio, si su actitud es positiva y cariñosa, probablemente te sentirás mucho mejor aunque no estés curado/a de tu dolencia.
Las personas tenemos el poder de estar mejor o peor y de potenciar los sentimientos positivos o negativos de los demás con nuestra actitud. La humanidad y el cariño que les brindemos a los demás podrán marcar las relaciones personales que tengas de por vida. Con las personas que no tienes mucha relación no las tratas con amor, porque necesitas más relación para ello, pero aquí entra en juego el cariño. Aunque está en un escalón por debajo del amor, es la actitud que te ayudará a sentirte bien con los demás y que los demás se sientan bien contigo.
El cariño es una medicina emocional muy potente
Si enfermas y nadie de tu alrededor te trata con cariño, es más que probable que sufras peor tu enfermedad e incluso, que empeore de intensidad o se complique. Esto puede ocurrir simplemente por la falta de cariño en tu vida. Es imprescindible que sea una realidad porque es la mejor medicina que existe, junto con el amor. Por ejemplo, si estás ingresado en el hospital, tus familiares te darán amor incondicional en cada visita, pero tus conocidos o los médicos que no te conocen pero te tratan, ellos… te darán cariño.
Todos tenemos en nuestro interior el poder de dar cariño a los demás y poder frenar los dolores del alma de aquellos que nos rodean. La actitud cariñosa es sin duda, lo mejor que podemos hacer para poder relacionarnos positivamente unos con otros. El cariño ayuda a que las emociones positivas florezcan, y éstas, son necesarias para tener bienestar general. Si te sientes bien, tendrás mejor salud y si tienes mejor salud… ¡te irá mejor la vida!
Por otra parte, también están y existen las emociones negativas que ellas, solo nos hacen daño tanto física como emocionalmente. Para que no nos hagan daño no debemos permitir que nos controlen y que no se vuelvan demasiado intensas. Las emociones negativas son necesarias y debemos aceptarlas, porque ellas nos ayudan a entender lo que nos ocurre y por qué nos ocurre. Además, son las encargadas de que actúes para cambiar aquello que te molesta o que te irrita y volver a tener bienestar físico y emocional. Si permites que las emociones negativas dominen tu vida, podrás tener dolores de barriga, dolores de cabeza, ansiedad, problemas de sueño, te enfermarás más… si cuando tienes emociones negativa recorriendo tu cuerpo, tienes una buena dosis de cariño, entonces esas emociones perderán el poder de ti.
El cariño se puede obtener y regalar de múltiples maneras: una palabra bonita, disposición para ayudar a otros, un abrazo de los que reconfortan, palabras sinceras… son caricias en el alma que ayudan a que tu cuerpo tenga mejor salud. Que la sociedad y todas las relaciones en general vayan mejor, dependen en gran medida, de la cantidad de cariño que somos capaces de darnos unos a otros.
Encontrar el cariño
Llegados a este punto, quizá quitas encontrar la forma de tener cariño de forma más rápida en tu vida, ¿verdad? No se compra ni tampoco se vende, es como el amor… simplemente existe y debe nacer de dentro para que sea real y verdadero. No puedes exigir a otras personas que te den cariño si no lo sienten por ti… Y tampoco puedes obligarte a dar cariño a otros si no sientes que lo haces desde el corazón. Sería ser una persona falsa y nadie quiere a personas tóxicas cerca de sí.
Pero, merece la pena recordar que todos tenemos la capacidad de dar cariño a otros siempre y cuando seamos capaz de trabajar en nuestro interior: la empatía, el altruismo y la asertividad. Todos podemos recibir cariño incluso de las personas que menos esperábamos o de forma inesperada. El cariño es sin duda una gran actitud que nos llena el alma de caricias deseadas.
Si comienzas a prestar atención a tu alrededor, comenzarás a darte cuenta de que el cariño se te presenta de muchas formas diferentes. Si pasan los días y no eres capaz de descubrir de dónde sale el cariño o cómo lo estás recibiendo, entonces, tendrás que fijarte un poquito más… te ayudamos.
Ten cerca a personas que te quieran. Ten cerca a personas que te aprecien y que te quieran, que sepan escucharte cuando necesites hablar y que te entiendan incluso cuando a ti te cuesta hacerlo. Reír juntos es una forma poderosa de superar los malos momentos.
Hazte amigo de niños y ancianos. Los niños ofrecen un cariño y un amor que no encontrarás de ninguna otra manera. Ellos son puros, sinceros y altruistas… Cuando dan cariño lo hacen desde lo más profundo de su corazón. Los ancianos, por su parte, son personas que saben mucho sobre la vida y que te hablan desde la experiencia… ellos siempre te hablarán desde el cariño, si primero les tratas tú con respeto.