El cortisol es conocida de manera popular como la hormona del estrés y va a desempeñar un papel fundamental y esencial en el cuerpo humano. Este tipo de hormona es creada por las glándulas suprarrenales y está involucrada en procesos fisiológicos de todo tipo como es el caso de la regulación del metabolismo, la respuesta del sistema inmunológico a diversas infecciones y en la gestión del estrés.
En el siguiente artículo vamos a hablarte de una manera detallada de la hormona del cortisol y cómo manejarla para conseguir cierto equilibrio de tipo saludable en el organismo.
Qué es el cortisol
El cortisol es una hormona que pertenece a la familia de los corticosteroides y se produce en las glándulas suprarrenales, que se encuentran arriba de los riñones. Este tipo de hormona se crea para regular diversas funciones del cuerpo de cierta importancia. Se conoce de manera popular como la hormona del estrés debido a que unos niveles elevados de estrés van a provocar que los niveles de cortisol en el cuerpo suban más de la cuenta. El cortisol aumenta con ciertos estímulos del organismo como es el caso de la fiebre, las bajadas de azúcar o el ejercicio físico.
Cuáles son las funciones del cortisol en el cuerpo
El cortisol va a desempeñar numerosas funciones en el organismo:
- El cortisol ayuda a regular los niveles de azúcar en la sangre, la presión arterial y el metabolismo de grasas, proteínas y carbohidratos.
- Es una hormona que tiene efectos antiinflamatorios que ayudan al cuerpo a controlar la inflamación y responder a las infecciones.
- El cortisol forma parte de la respuesta del cuerpo ante situaciones estresantes. Aumenta los niveles de energía y mejora la capacidad del cuerpo para lidiar con el estrés, ya sea físico o emocional.
- Se trata de una hormona que va a influir en el ciclo de sueño y en la regulación del estado de ánimo. Unos niveles demasiado altos de cortisol pueden afectar negativamente el sueño y contribuir a ciertos trastornos relativos al estado de ánimo como la ansiedad y la depresión.
- El cortisol también va a tener un papel importante en lo relativo a la regulación de la función cardiovascular, incluida la presión arterial y la función del corazón.
Cuáles son los efectos de un cortisol demasiado alto
Aunque el cortisol es esencial para conseguir cierto bienestar en el organismo, unos niveles demasiado elevados de cortisol pueden tener efectos negativos en la salud a medio y largo plazo:
- El exceso de cortisol puede provocar una acumulación importante de grasa alrededor del abdomen, dando lugar a un mayor riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares y metabólicas.
- Niveles elevados de cortisol pueden provocar resistencia a la insulina, lo que aumenta el riesgo de desarrollar una enfermedad como la diabetes tipo 2.
- Si bien el cortisol tiene efectos antiinflamatorios, en exceso puede llegar a debilitar el sistema inmunológico, aumentando la probabilidad de padecer infecciones y enfermedades.
- Los niveles elevados de cortisol pueden interferir de manera directa en el propio sueño, dificultando el mismo.
- Un desequilibrio en los niveles de cortisol se asocia a trastornos del estado de ánimo como es el caso de la ansiedad y la depresión.
Cuáles son los síntomas de unos niveles de cortisol alto
Tener unos niveles de cortisol demasiado altos puede provocar una serie de síntomas bastante claros:
- Aumento importante de peso.
- Fuertes dolores de cabeza.
- Problemas para poder concentrarse de manera adecuada.
- Enrojecimiento en toda la zona de la cara.
- Dificultad para que las heridas se cicatricen y se curen de una manera correcta.
- Fatiga y debilidad muscular.
- Irritabilidad y cambios importantes de humor.
- Tensión arterial alta.
- Problemas de tipo emocionales como es el caso de la depresión y de la ansiedad.
Estrategias para manejar el cortisol
Dado el impacto que tiene el cortisol en el organismo, resulta importante manejar los niveles de dicha hormona para conseguir un equilibrio lo más saludable posible. No pierdas detalle de los siguientes consejos que te ayudarán a mantener unos buenos niveles de cortisol:
- La meditación, el yoga, la respiración profunda y otras técnicas para poder manejar del estrés pueden ayudar a reducir los niveles de cortisol del organismo. Estas técnicas van a promover la relajación y la tranquilidad.
- Hacer algo de ejercicio físico de manera regular puede ayudar a rebajar los niveles de cortisol en la sangre, a mejorar el estado de ánimo y a ayudar a conciliar el sueño de una manera adecuada.
- Una alimentación saludable y equilibrada, basada en la ingesta de frutas, verduras, proteínas magras y grasas saludables, va a ayudar a mantener estables los niveles de azúcar en la sangre y reducir la inflamación, algo que va afectar a los niveles de cortisol.
- Priorizar el sueño de unas 7 a 8 horas y mantenerlo en el tiempo puede ayudar a regular los niveles de cortisol en el organismo y mejorar la calidad del sueño.
- Beber demasiada cafeína y de alcohol puede aumentar los niveles de cortisol. Es por ello que es importante consumirlos con cierta moderación y no excederse en su consumo.
- Hay que saber gestionar las diferentes emociones. Resulta esencial el contar con ciertas herramientas que ayuden a gestionar de manera adecuadas las emociones que se presenten a lo largo del día. Dicha gestión permitirá tener totalmente controlados los niveles de cortisol en la sangre.
- Es recomendable aprender a reconocer de primera mano los pensamientos estresantes. No es necesario el eliminarlos, sino aceptarlos sin ningún tipo o clase de juicio. Hay que contar con la capacidad necesaria para poder procesarlos y buscar la mejor solución posible.
En definitiva, el cortisol es una hormona de una suma importancia que va a desempeñar numerosas funciones en el cuerpo humano. Si bien esencial para la supervivencia y el funcionamiento sano, unos niveles demasiado altos de cortisol en la sangre pueden tener efectos negativos en la salud a largo plazo. Es por ello que resulta importante saber manejar de manera adecuada el estrés y llevar un estilo de vida saludable para lograr un equilibrio adecuado de cortisol y promover el bienestar general.