Si alguna vez te han dicho que tienes un carácter fuerte, es posible que hayas dudado en si realmente te estaba diciendo algo bueno o si por el contrario, te estaba diciendo una crítica. En realidad, que alguien te diga que tienes un carácter fuerte no es para nada algo malo, puesto que te están diciendo que tu personalidad es fuerte y que probablemente sepas y demuestres en cada momento qué quieres y qué no quieres.
Pero ojo, hay veces que hablar de “carácter fuerte” puede llevar a equivocaciones. Hay personas que pueden pensar equivocadamente que una persona que no sabe controlar sus emociones más intensas, que grita o que se malhumora con facilidad, tiene un carácter fuerte. Nada más lejos de la realidad. Esto no es un carácter fuerte, cuando hay descontrol emocional lo que hay es inseguridad e inmadurez.
Tener un carácter fuerte
Una persona que tiene un carácter fuerte, será una persona que no vacila en sus comentarios o en sus acciones. Es una persona específica que sabe establecer metas y no se rinde hasta que las alcanza o si decide que esas metas no merecen la pena. Una persona con carácter puede hacer cosas independientemente que tenga las circunstancias en contra o que parezca que todo se pone en su contra.
No significa tener mal genio… ¡sabe lo que quiere!
Pero tener un carácter fuerte no equivale a tener mal genio, no tiene nada que ver con esto. Aunque es habitual que las personas asocien el carácter fuerte con personas que se enfadan con facilidad, en realidad una persona con carácter no gritan para acabar un conflicto ni tampoco menosprecian a los demás con sus acciones.
Una persona con carácter fuerte es una persona asertiva que sabe lo que quiere, cómo lo quiere y cómo lo dice a los demás. Es una persona que empatiza con los sentimientos de las personas que tiene a su alrededor y que cuando quiere conseguir algo, lo hará, si realmente cree que merece conseguirlo, a pesar de todo, pero sin dejar que su dignidad se socave por nada del mundo.
Saben poner límites y alejarse de las personas tóxicas
Las personas con carácter fuerte saben poner límites a las personas de su entorno y se protegen ante las personas tóxicas, porque las reconocen a tiempo. Si no las reconocen e intentan manipularla, en cuanto se dan cuenta ponen límites y se alejan de esas personas que han intentado hacerle daño. No son personas agresivas ni tampoco quieren intimidar a nadie, simplemente se hace respetar porque ella se respeta a sí misma por encima de todas las cosas.
No le importa reconocer sus miedos porque sabe que puede superarlos y convertirse en una mejor versión sí misma. No intentan imponer su criterio ante todo, si tienen la razón la tienen, y si no, no. La manipulación no va con ellos y tampoco se dejan manipular por los demás. Es una persona coherente con lo que hace y dice y con lo que piensa y hace.
No proyectan sus debilidades en los demás
No proyectan sus debilidades ante los demás, pero tampoco se doblegan ante los demás. No cruzan las líneas rojas en las relaciones interpersonales. No permiten que otros se aprovechen de ellos, no muestran su debilidad para que otros no intenten aprovecharse de ello, por eso, ante todo, buscan respeto respetándose a sí mismos.
En este sentido, igual que saben poner límites no pueden aceptar que otras personas crucen esta línea del respeto en su vida. No pueden tolerar las injusticias sociales porque no entienden cómo otras personas son capaces de dejarse “machacar” solo por aceptación social. Una persona de carácter fuerte, prefiere estar solo que mal acompañado.
Aprende de los errores
Una persona con carácter fuerte aprende de los errores, ya que en ocasiones, los errores pueden tener consecuencias importantes. Una persona que no es capaz de aceptar los errores que comete o de responsabilizarse de ellos, no es una persona de carácter fuerte, más bien es todo lo contrario. Una persona con carácter sabe que no hay nada malo en cometer fallos, sabe que es de sabios rectificar y aprender de los errores cometidos en el pasado.
Las personas aprendemos a medida que avanzamos en la vida, que caminamos por el sendero de nuestro día a día. Las experiencias son la oportunidad para aprender a caminar mejor, a conocernos y a entender la vida. Las personas con carácter fuerte saben perdonarse a sí mismos pero esto no significa que se olviden de sus errores.
Aprender de los errores y actuar acorde a sus valores internos, les aporta a las personas con carácter fuerte, una gran paz interior y tranquilidad emocional. Porque se sienten personas equilibradas que pueden avanzar en su vida, a pesar de las dificultades que puedan encontrarse por el camino.
22 características de las personas que tienen un carácter fuerte
A continuación vamos a hablar sobre algunas características que las personas con carácter fuerte tienen en su personalidad. Si te consideras una persona con carácter fuerte, te sentirás identificado con la gran mayoría de estas características, pero recuerda algo importante: tener carácter no significa que tengas mal humor. Son dos cosas totalmente diferentes… ¿Tienes estas características?
- Eres tenaz
- Apuestas por la honestidad
- El optimismo es parte de ti
- Eres consciente de tus acciones
- Confianza en ti mismo y en los demás
- Te das cuenta del comportamiento de los demás
- Te adaptas a las circunstancias
- No te frustras en el primer intento fallido
- Eres flexible a los acontecimientos
- Las personas saben que pueden confiar en ti
- Eres autosuficiente
- Te gusta ser autodidacta
- Sabes que la vida no siempre es justa y lo aceptas
- Sabes controlar tus acciones y tus emociones
- Eres capaz de hablar con asertividad
- Celebras el éxito de los demás, sin envidias
- Si tomas riesgos, siempre son calculados
- Aprendes de los errores
- Te gusta estar en compañía, pero también disfrutas de tu soledad
- Te comprometes con tus objetivos a largo plazo
- Sabes controlar los tiempos de estrés sin que el estrés te controle a ti
- Priorizas tu salud y tu bienestar ante todo
Me dicen que tengo carácter fuerte, me identifico con esas 20 características.
En algunas oportunidades me adelanto a los hechos, y hasta siento lo que el otro piensa o lo que va a contestar.
Me han descrito así soy…