Experiencias

La vida se compone de experiencias, de todas esas vivencias que aparecen por el camino y que te hacen seguir uno u otro sendero. Algunas de ellas se eligen y pueden resultar positivas o negativas, otras en cambio, son impredecibles y pueden surgir en cualquier momento. Sin embargo, todas las experiencias vividas tienen un sentido, un aprendizaje. Tanto las que te dejan con un recuerdo positivo, como las que te dañan y te causan incapacidad para realizar determinadas cosas. Porque, en definitiva, cada uno está hecho de esos momentos que se acumulan a lo largo de los años.

Las experiencias pueden causar rechazo hacia uno mismo, culpabilidad y diversos sentimientos negativos que nos producen daño. Por ello, se tiende a ocultar en el fondo de la memoria esas experiencias que nos causan vergüenza o sufrimiento por diferentes motivos. Sin embargo, esas vivencias forman parte de la vida y de alguna manera, deben utilizarse en el desarrollo personal.

En lugar de ocultar esos sentimientos, podemos aceptar que esas experiencias nos han marcado y que somos lo que somos gracias a ellas. Aprender a resignificarlas es clave para que el recuerdo de esas situaciones, nos produzcan un sentimiento positivo en lugar de negativo. Por ejemplo, si tienes en la memoria una vivencia que te produjo un gran dolor y que solo el recuerdo te produce sufrimiento, puedes transformarlo en una vivencia de la cual obtuviste un aprendizaje. De forma qué, el sufrimiento que te crea esa experiencia disminuye y, en definitiva, te ayuda a salir del paso y seguir adelante.

Algunas personas tienen la capacidad de aprovecharse de esas situaciones y obtener un aprendizaje de cada una de las experiencias de la vida. Es decir, aprenden a resignificar las experiencias vividas para que se conviertan en herramientas de aprendizaje, en lugar de piedras que impiden salir adelante. Esas personas que deciden compartir esas vivencias, en ocasiones resultan fundamentales para otras personas. Porque a través de las experiencias de otros, uno puede sentirse identificado y encontrar la respuesta a ciertas preguntas que cuesta responder.

Porque no es lo mismo ver una película sabiendo que otro es el personaje, que vivirlo en primera persona. Aunque las vivencias sean similares, sentirte identificado con otra persona suele ser un nexo de unión, una fuerza que inevitablemente te atrae. Si esa persona fue capaz de superar esa situación, tú también lo serás y todo gracias a que alguien pudo compartir sus experiencias.

Eso y mucho más es lo que podrás encontrar en estas páginas, experiencias y vivencias de otras personas que pueden resultar motivadoras o inspiradoras. Muchas personas se sirven de las experiencias de otras personas para realizar determinada acción. Porque el desconocimiento genera inseguridad, pero saber que otra persona ha llevado a cabo la misma hazaña, te ayuda a eliminar el factor sorpresa, te hace sentirte más preparado para lo que pueda venir.

Todo eso es lo que te contamos en esta sección, porque aprender de las propias experiencias, así como las vividas por otras personas, es una herramienta de aprendizaje y evolución personal. Si lo que buscas es tu propio crecimiento, conocerte mejor a ti mismo para trabajar en tu persona y encontrar la mejor versión de ti mismo, el camino es el aprendizaje.

Aprender a valorar determinadas cuestiones que tienes en la vida y que quizá no sepas ver lo importantes que son. Aprender a valorarse a uno mismo, trabajar en el amor propio, en la personalidad, en los aspectos positivos que te convierten en alguien excepcional, es un trabajo complejo que nunca termina.

Tus experiencias tienen un valor determinado para tu vida, te enseñamos a encontrar el sentido a algunas de ellas para que puedas aceptarlas como parte de ti. Porque solo así te aceparás a ti mismo tal como eres y podrás mejorar esos aspectos con los que no te sientes de todo conforme.